La Prensa Hacemos periodismo desde 1888

En agosto del año 2020 falleció el profesor de artes marciales Sirio Sosa Baldión, que tuvo por décadas su Dojo en la calle Treinta y Tres número 32. Con noventa y un años el viejo maestro se fue de este mundo pero dejó mucho, la creación de su amado arte marcial el Sudehitodo, materiales increíblemente valiosos que hoy atesoran sus alumnos.

Pero Sosa también aprendió guitarra con Pablo Iribarne compuso, pintó, escribió, estudió idiomas como japonés que usó de base para el judo y el karate y también francés. Quedaron entonces un montón de libros, carpetas y materiales varios; por caso de francés donde desde su viuda, Isaura Rastellino, se puso en contacto con la Alianza Francesa que de muy buen agrado recibieron la donación del material que el profesor Sosa usaba para aprender el idioma junto a la profesora Ethel, cuyo salón principal de la academia de calle Amorim lleva su nombre.

 

Cuando el Estado no acciona por sus bienes desde otros lugares actúan. Por ejemplo, frente al Salto Shopping y Terminal hay un enorme predio de AFE que tiene además una edificación en piedra pero pasan las administraciones y no hay decisiones sobre el punto. Por lo que la gente avanza sobre el lugar, pues es una zona de valor y de crecimiento.

 

Por ejemplo se están instalando sobre la Avenida Barbieri un puesto bien armadito de verduras, grandecito por decirlo de algún modo, y también una especie de casa de comidas en otros lugares de este enorme predio del ente ferroviario. Han existido muchas propuesta para el uso de este espacio pero no se avanza en ninguna y los años pasan. Por ejemplo, varios cuidadores de autos están armando un estacionamiento bien frente al Shopping pues es cómodo, queda cerca y hay una cebra que permite cruzar con facilidad al centro comercial. Lo que no hace el Estado es a la larga usado por gente que necesita trabajo y más en una ciudad como Salto llena de problemas en este sentido.

 

Vamos a tener que esperar por la clásica mandarina porque estamos en tiempo de satsuma, una variedad cítrica que por su versatilidad va ganando adeptos. La satsuma es linda para comer, tiene poca semillas, es dulce y también sirve para jugo o dulce por lo que este tiempo de espera de la clásica mandarina salteña va dejando paso a la que nombramos.

 

También hay que marcar que todo está muy condicionado por el mercado internacional y como se exporta y mucho y eso genera trabajo y desarrollo se van cambiando las plantas para poder seguir insertándose en el mercado que tiene requisitos y exigencias que hay que cumplir para vender.

 

Comentarios potenciados por CComment

Ranking
Recibirás en tu correo electrónico las noticias más destacadas de cada día.

Podría Interesarte