Anotaciones Callejeras
Ayer tuvimos ocasión de conversar con Raquel, una mujer " con mucho orgullo nacida, criada y que todavía vive cerca de Cerros de Vera", para citar textualmente sus palabras. Fueron varias las cosas que habló, por ejemplo de los avances de la tecnología. En ese sentido, decía que "parece mentira que yo ahora leo todos los días La Prensa en el celular... Antes solo podía tener noticias con el informativo de la radio cuando no se nos cortaba...". Pero después el tema derivó hacia la muerte, hace pocos días, de Carlucho Moreno, el joven ex diputado sanducero. Nos recordaba Raquel, que "este hombre fue el que tenía el proyecto para instalar una estación de servicio en la zona donde se encuentran la rutas 4 y la 31...y que pensaba también agregarle un local de cobranzas, un comedor y varios servicios más".
Ese proyecto había entusiasmado mucho a la gente de zonas rurales, decía nuestra lectora, y por eso es que Moreno se había hecho más conocido y más querido en esa parte del departamento de Salto.
En estos últimos días, hubo lluvia y viento. Como consecuencia, varias calles, de muy diferentes barrios, quedaron sin alumbrado público. Algunas, todavía anoche permanecían así, a oscuras. Una persona nos explicaba que "todo el problema se reduce a esto: el cableado de la ciudad es muy antiguo, está muy deteriorado... Por más que se recambien los focos, como se hizo mucho en la administración anterior, si no se moderniza el cableado, el problema va a seguir". El gran tema es que esa modernización implicaría mucho dinero. ¿Cuándo se podrá hacer?
Supimos que ayer fue el Día del Almacenero. Un periodista de este vespertino llegó a saludar al almacenero de su barrio y este le comentó sobre lo difícil que está para mantener un comercio en pie, sobre todo un pequeño almacén de barrio. El hombre tiene más de 40 años en el oficio detrás del mostrador, pero sostiene que recuerda pocos momentos tan difíciles como el presente.
Entonces enumeró una serie de factores que lo están perjudicando: “mucha gente está encargando por internet hasta la ración para el perro; tengo en el cuaderno cuentas que ya las veo como incobrables, y la gente sigue pidiendo fiado, si no fío pierdo clientes y si sigo fiando no puedo reponer mercadería; a mí, la gente a la que le debo no me espera, tengo que pagar en fecha alquiler, impuestos, agua y luz…; tengo muchos clientes que se fueron a supermercados donde le aceptan todas las tarjetas y pagan en cantidad de cuotas; ¿y quiere que le agregue algo más? Están bravísimos los robos, las rapiñas…la verdad que tenemos miedo y cada vez tratamos de encerrarnos más temprano”.
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