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El espíritu solidario y deportivo volvió a brillar en la ciudad de Salto. Este domingo, el Polideportivo local será escenario de un torneo internacional de fútbol inclusivo, organizado por el referente social Gabriel Rosconi en conjunto con el licenciado Emanuel Priario, y con la participación de instituciones locales como Salto Uruguay, Ceibal, Hogar Flavia, Esportivo Rodó, Salto Fútbol Club y la selección de Buenos Aires de fútbol adaptado para chicos con parálisis cerebral.

El evento, de entrada libre y gratuita, busca mucho más que resultados deportivos: apunta a la integración, la convivencia y el aprendizaje mutuo entre jóvenes con y sin discapacidad, bajo un mismo lenguaje universal: el fútbol.

“La pelota es mágica”, inclusión, amistad y aprendizaje

En una entrevista en el streaming de Diario La Prensa, Rosconi destacó que el objetivo central es generar espacios donde los niños y adolescentes con discapacidad puedan jugar y disfrutar, “La pelota es mágica. A través del fútbol hemos conseguido muchísimas cosas, sobre todo la integración. Y al final del evento compartimos un almuerzo, porque lo que queda es la confraternidad y el aprendizaje de las experiencias de los demás”.

Para Rosconi, estos encuentros son una oportunidad de crecimiento no solo para los jugadores, sino también para sus familias, entrenadores y comunidades, “Cada jornada deja una enseñanza. Los chicos que vienen de Buenos Aires traen historias y vivencias valiosas de las que todos aprendemos”.

El encuentro deportivo inclusivo se llevará a cabo este domingo 7 de diciembre, de 8:30 a 12:30, y contará con la presencia especial de la Federación Argentina de Fútbol de Parálisis Cerebral.

De un pequeño club barrial a un referente internacional

Lo que comenzó como un modesto proyecto social para mejorar el Club Sportivo Rodó terminó transformándose en una iniciativa con proyección regional. “En principio solo queríamos mejorar el club. Hoy estamos organizando torneos internacionales de fútbol inclusivo”.

A lo largo de los últimos años, el club ha impulsado eventos pioneros en el continente, como la Primera Copa Rioplatense entre Rodó y Racing de Argentina; la Primera Copa Sudamericana de Selecciones y Equipos Inclusivos, con participación de Perú y Uruguay; y la Primera Copa Sudamericana de Fútbol para chicos con Síndrome de Down, disputada en Salto y replicada luego por los gobiernos de Chile y Perú.

“Tenemos el orgullo de decir que la primera Copa Sudamericana de Fútbol de Síndrome de Down nació en Salto”, afirma Rosconi. “Ver que otros países adoptaron la idea demuestra que hicimos algo bueno”.

Crecimiento, esfuerzo y compromiso comunitario

El dirigente salteño no oculta el esfuerzo que implican estas iniciativas. Sin grandes apoyos económicos, los eventos se han sostenido con el aporte de la comunidad y la colaboración de empresas locales. “Esto sale todo de Rodó. No hay un ente público que nos financie. Lo hacemos con nuestros propios fondos, con los padres y con la gente que cree en el proyecto”.

Uno de los hitos fue la Copa Sudamericana “Refrescos Uy”, realizada con el apoyo de la empresa local Cofuesa, cuya edición incluso viajó a Perú. “Esa copa fue financiada por nosotros y se terminó jugando en otro país. Es una locura hermosa”, recuerda Rosconi entre risas.

Deporte, trabajo y vivienda, un club con impacto social

Más allá del fútbol, Sportivo Rodó se ha convertido en un motor de desarrollo social. En noviembre, Rosconi presentó ante la Intendencia de Salto un proyecto laboral para personas con discapacidad, que busca integrar a veinte jóvenes en tareas comunitarias. El plan propone que trabajen en cuadrillas de limpieza de espacios públicos, en turnos de cuatro horas, con el fin de que puedan combinar empleo y estudio.

“Queremos que tengan un ciclo de vida completo: trabajo, recreación y educación”, explica Rosconi. “Eso les da autonomía y dignidad”. Además, el club impulsa la cooperativa de vivienda “Impulsa Rodó”, integrada por quince familias que se reúnen en las instalaciones del club y sueñan con acceder a su casa propia.

“Les brindamos el espacio gratuito para sus reuniones y actividades. Verlos organizados, entusiasmados, es emocionante. Me imagino el día en que corten la cinta de sus viviendas. Será un momento inolvidable”.

El crecimiento del fútbol femenino y la transformación del club

Sportivo Rodó también abrió sus puertas al fútbol femenino, bajo la coordinación de Esther Rosconi, nueva presidenta del área. “Les costó organizarse, pero hoy ya tienen su camiseta, su equipo y compiten oficialmente”, relata Gabriel con orgullo. La transformación del club ha sido profunda.

“Cuando entramos, los vecinos querían cerrarlo por los problemas que había. Hoy, los mismos vecinos están felices. Logramos dar un giro de 180 grados”. El club pasó de ser un espacio en decadencia a un punto de encuentro saludable, inclusivo y familiar. “Quiero que mis hijos y mis amigos se sientan orgullosos del lugar. Que la gente diga: ‘Mirá qué lindo lo que hicieron en Rodó’”.

Trabajo en equipo y nuevos desafíos

El crecimiento también se refleja en la estructura organizativa. De los cuatro fundadores iniciales Rosconi, su padre César, Juan Larreche y Miguel Juanena hoy el club cuenta con múltiples áreas: gimnasio, fútbol inclusivo, femenino, playa y juvenil, cada una con su propio responsable. “Nos reunimos todos para que cada uno sepa hacia dónde va el club. Antes éramos cuatro, ahora somos muchos, y eso hay que cuidarlo”.

En lo deportivo, Rodó apunta alto, “Queremos salir campeones el año que viene, pero lo más importante es haber ganado en lo social. Primero hay que construir desde adentro, con una base sólida, para luego llegar al triunfo deportivo”.

Mirando al futuro, un torneo internacional en Salto

Rosconi adelantó que ya se trabaja en un nuevo evento internacional para septiembre del próximo año, con equipos como Racing e Independiente de Argentina, Peñarol, Plaza Colonia, Wanderers de Durazno y Abriendo Caminos de Punta del Este. “Queremos traer 500 o 600 personas a Salto para que disfruten de las termas, conozcan la ciudad y vivan el fútbol como una fiesta. Que el deporte también ayude a mover la economía local”.

“Lo hacemos por cariño”

Rosconi reflexionó sobre el valor del trabajo voluntario, “Nadie cobra nada. Todo es honorario. Pero la satisfacción de ver crecer al club y a las personas que lo integran no tiene precio. Lo hacemos por cariño, por amor a este lugar que cambió tantas vidas”. Con humildad, esfuerzo y una visión inclusiva, Sportivo Rodó se ha convertido en un ejemplo de cómo el deporte puede ser una herramienta poderosa para transformar realidades, unir comunidades y sembrar esperanza.

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