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El gobierno avanza a pasos muy lentos en su hoja de ruta y se encuentra con varios dilemas.

Uno, sus propios errores, la gente de medio pelo que nombró y tuvo que sacar porque no servía ni para explicar errores. Lo dijimos cuando vimos el gabinete, poco, mucha militancia, mucho "compañeras y compañeros" pero faltaba sustancia. Pero después vendrá el problema de la reactivación, de la preservación del tejido productivo, el problema del empleo que es lo que se le está reclamando pues dijeron que el anterior gobierno se dedicaba a los malla oro y solo a acomodar las cosas de los arriba. Este discurso prendió, sobre todo para noviembre donde a la larga, hay que decirlo, Yamandú Orsi ganó sin despeinarse el jopo.

Ahora tiene la bendita tarea de encaminar eso con gente como los comunistas que todavía admiran a Maduro, o un Pacha Sánchez que cada vez que ve la caja del Estado se le hace agua la boca.

Mucha gente que no estaba tan mal votó el cambio de gobierno en el entendido que habría un mayor derrame de la economía y para eso son clave las negociaciones de los Consejos de Salarios, rondas que van a comenzar y que deberán tener siempre el laudo final del Poder Ejecutivo ante cada acuerdo o la búsqueda del mismo. ¿Pero qué va a pasar si no se ponen de acuerdo y el delegado del Ministerio de Trabajo, que orientan los comunistas, mete la cola y da un aumento mayor al negociado por los representantes de los empresarios y estos achican la plantilla generando un incipiente desempleo? No va a ser sencillo entre otras cosas porque la gente está muy álgida con el tema empleo, al ver cómo han cerrado industrias que acusan entre otras a la presión sindical. Encima Paraguay atrae y mucho con su política de aporte fácil y poco.

Si el amable lector tiene el gusto lo invitamos a mirar con detenimiento productos que siempre fueron uruguayos como galletitas de marcas tradicionales hechas en Montevideo. Podrá ser que que la marca se mantiene pero del otro lado dice "made in Paraguay" o "hecho en Brasil", lo que hace que una parte sea en el Uruguay pero la verdadera confección del producto sea fuera de frontera, esto se hace lógicamente por una conveniencia económica. Pero de todas formas no deja de ser un problema para todos, hay decenas de puestos de trabajo que se han ido perdiendo en el camino y no hay visos de solución.

El gobierno tendrá que atender demandas alocadas de pedidos de suba de salarios de privados y públicos con un país que no despega y empresarios que miran a Brasil y Paraguay como lugares de producción y a Uruguay como el de la logística de esa producción, pero donde se van perdiendo puestos de trabajo todos los días, que obviamente no los puede absorber siempre el Estado.

El jueguito de haber comprado a los ponchazos una estancia para Colonización va justamente contra ese Uruguay que debe cuidar el peso, que debe pensar sus estrategias en un mundo alocado,

De todas maneras la gente cuando votó a Orsi y al Pacha Sánchez con la larga sombra del Pepe, aún en vida, detrás, sabía como el MPP maneja la cosa pública, no será cuestión de arrepentimientos tan tempranos. Todavía queda una largo camino por recorrer y a Orsi demasiado temprano se le caen algunos indios en tanto otros muestran su verdadera vocación por gastar a mansalva plata que luego siempre se enjuaga con los impuestos de la gente. No nos olvidemos que esa estancia de Florida la pagaremos todos, porque el Estado no genera nada, al contrario, gasta a manos llena lo que generamos nosotros.

 

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