Sr. Director de Diario la Prensa de Salto. De mi mayor consideración. Soy un salteño que vive en Montevideo por asuntos laborales desde hace casi seis años. Cada vez que vuelvo a “mi pago”, encuentro algunos problemas en el tránsito que no da la impresión que fuesen difíciles de solucionar, pero no se solucionan. Leo La Prensa todos los días a través de las redes. Ayer leí con atención el artículo donde se hablaba de que hay vecinos que proponen modificar algunas cosas sobre lugares para estacionar en una calle céntrica (18 de Julio). Además de estar de acuerdo con lo que dicen, me vio entonces la idea de escribirle esas líneas. Aprovechando igual que esos coterráneos, que se viene un nuevo gobierno, quiero comentar que hay tres lugares donde no entiendo cómo no ocurren más accidentes, porque en verdad son muy peligrosos.

Uno es en el puerto, calle Chiazzaro y Brasil. En una época hubo una “lengua” de hormigón (desconozco el nombre correcto) que ordenaba el pasaje de autos. Ahora no hay nada, ni eso que había, ni semáforos, ni resaltadores, nada. Y es una esquina muy ancha. Los domingos de tarde, con el movimiento de la costanera es más peligroso todavía. Otro es la rotonda donde se entra al barrio Calafí, o sea avenidas Amorim y Rodó. ¡Se precisa señalización urgente! Así, con ese caos no se puede seguir. Un tercer lugar es la diagonal, en la Zona Este, de calle 8 de Octubre a 1° de Mayo. O sea, 1° de Mayo entre 8 de octubre y Agraciada, donde hay una diagonal muy transitada. Cualquiera puede darse cuenta que hay desde contenedores de residuos hasta comercios en esa plaza, que tapan la visión de quien circula por la diagonal y debe dar paso al que viene por 1° de Mayo. Cuando lo ve, ya lo tiene encima. Hay colocado un espejo en una columna, pero a veces confunde más y en días de lluvia no se ve nada.

Creo que no es gran cosa solucionar estos aspectos. Ojalá se atienda la inquietud. Sin otro particular, lo saluda, G.d.L.S.A.