Este viernes 2 de agosto falleció en Salto el Dr. Ramón Armando Mendoza Sabarros, reconocido por su compromiso con la comunidad vasca local, y actual vicepresidente del grupo Saltoko Euskaldunen Taldea. Tenía 74 años y fue un activo promotor de la cultura vasca en la región, además de un profesional (veterinario) destacado en el ámbito del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), donde trabajó durante toda su vida. Había nacido en junio de 1951. Uno de los màs firmes impulsores de la Euskal Etxea, ocupó cargos en varios períodos como directivo y se desempeñaba actualmente como vicepresidente. También fue integrante del coro Saltoko Abesbatza, sumando su voz a la expresión cultural del colectivo. Una de sus iniciativas más recordadas fue la instalación de la escultura en homenaje al marino vasco Sebastián Elkano, ubicada en uno de los accesos al Mercado 18 de Julio. Dicha obra fue donada por su amigo y colega, el Dr. Jorge Supparo Iraola, y representa un símbolo del vínculo entre la historia vasca y la ciudad de Salto.

Comunicado de Saltoko Euskaldunen Taldea

A continuación, se transcribe el comunicado oficial emitido por el Grupo Vasco de Salto: "Con mucho pesar informamos que hoy 2 de Agosto de 2025 ha fallecido el Dr. Ramón Armando Mendoza Sabarrós, socio, amigo y actual Vicepresidente de Saltoko Euskaldunen Taldea. Ramón nació en Salto el 19 de junio de 1951.

Fue otro entusiasta defensor y propulsor de nuestra Euskal Etxea, a pesar de no haber estado en el Acto de Fundación por encontrarse en el exterior cumpliendo una misión en el MGAP, donde trabajó durante toda su vida, cosa que lamentaba. Fue Directivo en varios períodos, ocupando el cargo de vicepresidente como lo era actualmente. Fue el propulsor de la colocación de la Escultura homenaje al Marino Vasco Sebastián Elkano en uno de los accesos al Mercado XVIII de Julio, obra donada por su amigo y colega el Dr. Jorge Supparo Iraola. Integrante del Coro Saltoko Abesbatza. Sentidos pésames y abrazo enorme a su Familia, en especial a su esposa, nuestra compañera Nair, y sus hijos. Goian Bego. La comunidad vasca de Salto lo despide con gratitud y profundo dolor, honrando su legado, su trabajo incansable y su calidez humana”.