El pasado jueves, el emprendimiento Empalme Km 525 celebró con orgullo su quinto aniversario, un hito que representa mucho más que un número: es el reflejo de años de esfuerzo, dedicación y la pasión de quienes lo hicieron posible. En un contexto en el que emprender no es tarea sencilla, este proyecto ha logrado consolidarse como una referencia local de Villa Constitución y zonas cercanas, combinando identidad, trabajo auto gestionado y un fuerte compromiso con la comunidad. Ubicado estratégicamente en el kilómetro 525, este espacio ha crecido de forma sostenida, apostando al desarrollo local, al comercio justo y al fortalecimiento de vínculos entre productores, consumidores y vecinos de la zona. A lo largo de estos cinco años, Empalme Km 525 se ha convertido en mucho más que un punto de encuentro comercial: es también un símbolo de lo que se puede lograr cuando hay visión, constancia y espíritu colectivo.

Un camino con desafíos y aprendizajes

Emprender, como bien saben quienes están detrás de este proyecto, no es para los débiles de corazón. Implica enfrentar adversidades, adaptarse a los cambios, asumir riesgos y, sobre todo, tener la convicción de seguir adelante aún cuando el camino se vuelve cuesta arriba. Cada uno de estos cinco años ha traído sus propios desafíos, desde lo económico hasta lo logístico, pero también ha traído satisfacciones, aprendizajes y muchas alegrías.

A lo largo de este tiempo, Empalme Km 525 ha ido sumando propuestas, mejorando sus instalaciones y ampliando su oferta, siempre con la mirada puesta en el desarrollo sostenible y en el apoyo mutuo entre emprendedores. Esa es una de sus mayores fortalezas: no caminar solo, sino generar redes.

Agradecimiento...

Desde ese espacio, quienes integran Empalme Km 525 agradecen profundamente a todas las personas, familias, organizaciones e instituciones que han acompañado el proceso, ya sea como clientes, proveedores, colaboradores o simplemente como quienes han alentado el sueño desde sus inicios. En este nuevo aniversario, renuevan su compromiso de seguir creciendo con los pies en la tierra, el corazón en la comunidad y la mirada puesta en el futuro.