Sr. Director de La Prensa: No hay cuadra en nuestra ciudad, que no presenten baldosas flojas o la falta de varias de ellas. Demás esta decir que ello, genera problemas y peligros, especialmente para nuestros adultos mayores, algunos de los cuales, por esa causa, han sufrido caídas. En varios casos, con lesiones como fracturas, tanto simples como complejas en los casos mas graves o dolorosos esguinces que generalmente y a cierta edad, cuesta semanas y hasta meses, en superarse.

Situaciones de las que tampoco escapan niños y hasta algunos adultos de edad media, apurados en su transitar, vaya a saber porqué. Pero, más allá de lo señalado, el mal estado de las veredas, dan una mala imagen de la ciudad. Y si sumamos esta situación, el lamentable estado de las calles, llenas de baches, con suerte, presentando remiendos y no una deseable repavimentación, como seria más lógico. Lo que sumado a la basura regadas de los contenedores, por los cada día más numerosos hurgadores, brindan una pésima imagen que nuestra ciudad y nuestra gente, no merecemos. Por todo ello, pienso que la Intendencia, podría alentar y realizar una gran “intervención” como se dice ahora, en torno a las veredas, alentando a que los  propietarios de las fincas procedan a la recuperación de las veredas,  con reposición de las baldosas que falten, dando así una oportunidad a quienes viven de “changa” o bien, por cuadrillas de municipales, cargándose el costo de este trabajo a la cuenta de la contribución inmobiliaria, con las facilidades que este impuestos municipal, concede para mantenerse al día o por medio de convenios, para regularizar atrasos. Gracias por el espacio.  JM