Familiares reclaman justicia por la muerte de un joven con trastornos mentales. "En cinco minutos me sacaron a mi hijo", dijo Silvia, madre de Lucas, un joven de 24 años con trastornos mentales. La mujer denuncia que su hijo fue asesinado por la Policía en un confuso operativo ocurrido el pasado 12 de mayo en Durazno. "Yo lo que quiero es que esto no quede así, a mi hijo lo mataron", declaró conmovida a Telemundo. Según su testimonio, la intervención policial fue violenta e injustificada. Esa noche, Lucas se encontraba alterado tras una discusión familiar. La situación, que había ocurrido otras veces, llevó a la familia a llamar a la Policía para que lo trasladaran a un centro de salud. Sin embargo, el desenlace fue fatal.

Una respuesta policial cuestionada

Los familiares aseguran que los efectivos llegaron con las armas listas para disparar, sin dialogar ni intentar comprender la situación. "No preguntaron qué pasó, ni cómo se llamaba el muchacho. Nada", explicó Silvia. El joven, al ver a los oficiales armados, reaccionó con insultos, lo que —según su madre— desató la violencia policial. “Me dijeron que me meta y empezaron a dispararle. Lucas se metió a la casa y ahí entraron. En cinco minutos me sacaron a mi hijo. Se escucharon como tres o cuatro disparos más. Lo sacaron esposado, todo ensangrentado”, relató.

Investigación en curso

El Ministerio del Interior dispuso una investigación de urgencia y un sumario administrativo al policía que disparó. La fiscal a cargo del caso ya mantuvo una reunión con el jefe de Policía de Durazno y se está a la espera del informe forense de la autopsia. Mientras tanto, la familia de Lucas reclama justicia y exige que se esclarezcan las circunstancias que rodearon su muerte. “Yo solo quiero que esto no quede así”, repite Silvia. Su dolor hoy también es una denuncia: que la respuesta a una crisis de salud mental no sea, nunca más, la muerte.