(Por el Dr. Álvaro Lima, Agrupación Humanista Armando Aguirre, Lista 888, Frente Amplio de Salto)
Antonio Merino, de Méjico, es el secretario general de la Alianza Latinoamericana y del Caribe de la Asociación Cristiana de Jóvenes. Es joven, alto, gusta del diálogo. Nos dice que visitó muchos países y que hay de todo en el mundo ACJ. “Por ejemplo Haití, donde los principal es asegurar el acceso al agua y el alimento”. También otros países más similares al nuestro. Sabe de la tradición que tiene la ACJ en Salto y nos recuerda nuestro pasado, los años en la casona de la calle Dr. Soca. Esa que tantos recuerdos atesora.

El secretario general de la Alianza visitó la Intendencia de Salto acompañado de Jesús Ithurralde (director general de Montevideo), Carlos Calisto (director ejecutivo ACJ Salto) y los directivos locales Sandra Cabillón y el arquitecto Juan Pablo Baldassini. Los recibió el secretario general de la comuna, Fabián Bochia.
Se abordaron temas generales y el aporte de la ACJ Salto a la comunidad.

Recordando los caminos trazados juntos. En ese marco nos recuerdan los campamentos de trabajo realizados por la ACJ con el apoyo de la comuna que generaron compromiso en los jóvenes, ganas de hacer cosas por los demás, de utilizar el tiempo de vacaciones para hacer mejor las cosas, hacer actividades distintas donde se use la cabeza, las manos, el corazón y el alma por la solidaridad.

Algo tiene la ACJ que se destaca nítidamente. Para nosotros es muy claro, nos referimos al tema de la inclusión. La ACJ hace deporte pero su misión no es la competencia sino el deporte como valor en sí. Entonces ahí juegan los que saben y los que no, los habilidosos y los que son (somos, je), medios troncos. Los flacos y los gordos, los altos y los bajos, es para todos. Pasa en el voleibol donde juegan a veces familias enteras. Y todos felices porque ese es el espíritu ACJ.
El secretario general de la Alianza dice además que el espíritu de la Asociación se mantiene y que ve un gran desarrollo en el Uruguay, donde hay una enorme tradición de ACJ. También es bueno decir que no se oculta el carácter cristiano que implica llevar ideales adelante. No está en acuerdo con alguna religión, sino que se siguen los pasos cristianos en el accionar. De ahí que a nadie llame la atención lo que decimos en cuanto a lo inclusivo. Nada más inclusivo que el cristiano y sus valores.

Un gusto entonces el paso de Antonio Merino por Salto y por todo el país. Un muchacho que encarna los valores de la ACJ y la lleva con orgullo por todos lados. Un verdadero representante de algo que valoramos mucho. Que supimos vivir y que supimos defender y que ahora difundimos con orgullo, pasión y ganas.-